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La CIA financia a otro grupo de estafadores: la "oposiciĆ³n" venezolana

Escrito por Wayne Madsen a travĆ©s de la FundaciĆ³n Cultura EstratĆ©gica,
Una vez mĆ”s, la Agencia Central de Inteligencia ha sido sorprendida financiando a un grupo de estafadores y estafadores a costa de los contribuyentes estadounidenses. En el Ćŗltimo caso, solo otro en los 72 aƱos de historia de la agencia, la junta ad hoc de CITGO, nombrada por el gobierno de Trump, la filial estadounidense de la empresa petrolera estatal venezolana, PDVSA, estĆ” acusada de administrar $ 70 millones de fondos en garantĆ­a, destinado al bono de PDVSA para el aƱo fiscal 2020, a los bolsillos de los funcionarios apoyados por la CIA del partido "Voluntad Popular" de la oposiciĆ³n venezolana encabezado por el llamado "presidente interino" de Venezuela, Juan GuaidĆ³.

AdemĆ”s de GuaidĆ³, quien estĆ” acusado por el legĆ­timo gobierno venezolano de lavado de dinero, traiciĆ³n y corrupciĆ³n, otros lĆ­deres de Voluntad Popular investigados por el Fiscal General de Venezuela y el Departamento de Justicia de los Estados Unidos incluyen a Carlos Vecchio, enviado de GuaidĆ³ en Washington; Rossana Barrera y Kevin Rojas, emisarios de GuaidĆ³ en CĆŗcuta, un pueblo fronterizo colombiano-venezolano; Sergio Vargara, cuƱado de Barrera y miembro del Congreso venezolano; El “embajador” de GuaidĆ³ en Colombia, Humberto CalderĆ³n Berti, el empresario opositor Miguel Sabal; y el jefe de gabinete de GuaidĆ³, Roberto Marrero. MĆ”s de dos docenas de otros lĆ­deres de la Voluntad Popular tambiĆ©n estĆ”n bajo investigaciĆ³n por fraude relacionado con dinero asignado por la administraciĆ³n Trump, en particular por el escĆ”ndalo IrĆ”n-Contra y el actual enviado especial de Trump para el cambio de rĆ©gimen en Venezuela, Elliot Abrams.
Barrera y Rojas estĆ”n acusados ​​de gastar dinero otorgado a la Voluntad Popular por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglĆ©s), una transferencia financiera de la CIA desde hace mucho tiempo, para el "socorro humanitario" para el supuesto nĆŗmero masivo de refugiados venezolanos en Colombia. Al parecer, los grifters de Popular Will utilizaron el dinero de la ayuda, incluido el recaudado por el multimillonario fundador de Virgin Group y el obvio engaƱo de la CIA Richard Branson, para hoteles caros, restaurantes lujosos, clubes nocturnos, prostitutas y ropa.
No sorprende que Abrams, con su historial de "dedos pegajosos" en torno al dinero de la asistencia de Estados Unidos y el extranjero, haya jugado una mano en el fraude de la oposiciĆ³n venezolana. Como subsecretario de Estado para Asuntos Interamericanos durante el gobierno de Ronald Reagan, Abrams estuvo involucrado en la recaudaciĆ³n ilegal de fondos para los contras de derecha apoyados por la CIA que luchan contra el gobierno socialista sandinista de Nicaragua. En 1991, frente a una condena por perjurio por mentir al Congreso, Abrams se declarĆ³ culpable de dos delitos menores de retener informaciĆ³n al Congreso sobre sus actividades de recaudaciĆ³n de fondos para los Contras. En 1992, Abrams y otros criminales de IrĆ”n-Contra fueron indultados por el presidente George HW Bush, uno de los no consagrados co-conspiradores de IrĆ”n-Contra. Abrams volviĆ³ a aparecer en 2001 en el gobierno de George W. Bush. Estuvo involucrado en el abortivo golpe de la CIA de 2002 contra el presidente venezolano Hugo ChĆ”vez, asĆ­ como en cocinar la inteligencia de los Estados Unidos para justificar la invasiĆ³n y ocupaciĆ³n de Irak por los Estados Unidos.
La participaciĆ³n de Abrams en cualquier actividad encubierta de los EE. UU. Es siempre una indicaciĆ³n de fraude masivo. El respaldo de Abrams a GuaidĆ³ y sus agentes y los recientes informes de fraude no son muy diferentes del notorio registro sĆ³rdido del neoconservador del Partido Republicano con lĆ­deres de la Contra como Adolfo Calero, el presidente de las Fuerzas DemocrĆ”ticas de Nicaragua (FDN); Arturo Cruz; Alfonso Robelo; EdĆ©n pastora; y Enrique BermĆŗdez.
Los fondos de la CIA dirigidos a los Contras para la compra de armas pronto llegaron a las manos de los narcotraficantes colombianos, incluidos Pablo Escobar y Carlos Lehder, del Cartel de MedellĆ­n. Se elaborĆ³ ​​un esquema elaborado en el que los Contras compraron, con fondos de la CIA, armas y cocaĆ­na, y el primero terminĆ³ en manos del Cartel de MedellĆ­n y el Ćŗltimo se enviĆ³ a los Estados Unidos con un rendimiento financiero muy atractivo. Todos lo hicieron bien, incluidos los lĆ­deres de la Contra que pasaron gran parte de su tiempo en Miami donando fondos a los cofres republicanos a travĆ©s de las oficinas de los principales lĆ­deres cubanoamericanos como Jorge Mas Canosa. El establecimiento de la FundaciĆ³n Nacional Cubano Americana (CANF) en 1981 a instancias de los funcionarios del gobierno de Reagan, incluido el asesor de seguridad nacional Richard Allen y Abrams, Mas Canosa pronto se convirtiĆ³ en un activo importante tanto para la CIA como para el Partido Republicano.
El CANF tambiĆ©n servirĆ­a como un artificio conveniente de lavado de dinero de la CIA para ayudar a financiar grupos terroristas de derecha en Cuba, Nicaragua, El Salvador, Honduras, Colombia y otras naciones latinoamericanas . El CANF sigue siendo una potente fuerza polĆ­tica, una que beneficia a los polĆ­ticos de derecha en Florida y AmĆ©rica Latina, incluidos los dos senadores republicanos de Florida, Marco Rubio y Rick Scott, ambos fanĆ”ticos partidarios de GuaidĆ³.
En 1992, la CIA ayudĆ³ a lanzar otro fraude masivo cuando ayudĆ³ a formar el Congreso Nacional IraquĆ­ (INC), un grupo de oposiciĆ³n iraquĆ­ dirigido por uno de los amigos neoconservadores de Abrams, Ahmad Chalabi. Chalabi tambiĆ©n se involucrĆ³ en la defraudaciĆ³n del Banco Petra de Jordania, que se derrumbĆ³ en 1989. Chalabi se asegurĆ³ esa falsa informaciĆ³n de inteligencia. El fabulista iraquĆ­-alemĆ”n Rafid Ahmed Alwan al-Janabi, una Ćŗnica fuente de inteligencia occidental desacreditada y burlonamente llamada "Curveball" por la CIA por su falta de confianza, terminĆ³ en el escritorio del presidente George W. Bush, cortesĆ­a de estafadores como Abrams, un Oficial del Consejo de Seguridad Nacional. Chalabi se convirtiĆ³ en el Ministro de PetrĆ³leo de Irak en el gobierno tĆ­tere de los Estados Unidos establecido en Bagdad tras la invasiĆ³n estadounidense. Chalabi fue inmediatamente investigada por falsificar la moneda iraquĆ­, el gran robo de activos nacionales y privados iraquĆ­es y el espionaje en nombre de IrĆ”n.
Abrams y su camarada neoconservador tambiĆ©n jugaron un papel decisivo en el lanzamiento de la carrera de otro estafador de la CIA, el general Khalifa Haftar, un desertor del ejĆ©rcito del lĆ­der libio Muammar Gadafi. Con la seguridad de la CIA en el norte de Virginia en 1990, Haftar, quien se convirtiĆ³ en ciudadano de los Estados Unidos, participĆ³ en varios putches apoyados por la CIA destinados a derrocar a Gadafi. En 2011, al comienzo de la revuelta contra Gadafi, la CIA insertĆ³ a Haftar en el este de Libia, donde finalmente se convirtiĆ³ en un caudillo virtual, gobernando el territorio ocupado de su ejĆ©rcito desde Tobruk con la ayuda de Egipto, Arabia Saudita, los Emiratos Ɓrabes Unidos, Israel. y los mercenarios con sede en Abu Dhabi dirigidos por Erik Prince, el fundador de la antigua firma de mercenarios favorita de la CIA, Blackwater, y hermano de la Secretaria de EducaciĆ³n de Donald Trump, Betsy DeVos. SegĆŗn informes, Haftar tambiĆ©n se estĆ” enriqueciendo a sĆ­ mismo y a su familia al embolsar los ingresos de las ventas de petrĆ³leo de Libia en el territorio que controlan sus fuerzas.
La historia de apoyo de la CIA para estafadores y grifters como GuaidĆ³, Calero, Mas Canosa, Chalabi y Haftar se expande a una virtual "galerĆ­a de pĆ­caros" de poineros, canallas y otros valiosos. El general Lon Nol fue la elecciĆ³n de la CIA para hacerse cargo de Camboya despuĆ©s del golpe militar de 1970 contra el PrĆ­ncipe Norodom Sihanouk. SegĆŗn un memorĆ”ndum del SECRETARIO SENSIBLE / SƓLO PARA LOS OJOS del 26 de mayo de 1970 del asesor de seguridad nacional estadounidense Henry Kissinger al presidente Richard Nixon, Lon Nol se resumiĆ³ como "emocional y no muy realista". Sin embargo, ese es el tipo de persona que La CIA siempre ha optado por abrazar, con los neoconservadores entre los que han defendido con avidez este tipo de fraude polĆ­tico en el Congreso y los medios de comunicaciĆ³n. Lon Nol se creĆ­a a sĆ­ mismo como un autĆ©ntico "guerrero santo" mon-jemer con poderes mĆ­sticos. "Black Papa", que Lon Nol preferĆ­a que sus seguidores lo llamaran, muriĆ³ en Fullerton, California en 1985, aĆŗn en el paro de la CIA.
DespuĆ©s de la caĆ­da de Saigon en 1975 ante las fuerzas vietnamitas y vietcong del norte, los activos de la CIA y el primer ministro y vicepresidente vietnamitas Nguyen Cao Ky finalmente se establecieron en Westminster, California, no lejos de Lon Nol. En lugar de insistir en ser venerado como un demi-dios, Ky era mĆ”s prĆ”ctico que Lon Nol; corriĆ³ una tienda de licores. El ex jefe de la CIA en el ejĆ©rcito anticomunista de Hmong en Laos, el general Vang Pao, fue arrestado en California en 2007 por intentar ilegalmente derrocar al gobierno de Laet de Pathet en Laos. La presiĆ³n de la CIA finalmente llevĆ³ al gobierno de los EE. UU. En 2009 a retirar todos los cargos de conspiraciĆ³n contra Vang Pao. Ciertos elementos en la CIA estaban preocupados por lo que Vang Pao podrĆ­a haber dicho, bajo juramento, durante un juicio completo sobre su papel en la CIA es contrabandear opio desde el TriĆ”ngulo Dorado en el sudeste asiĆ”tico a travĆ©s de los auspicios de aerolĆ­neas propietarias de la CIA como Air America.
Juan GuaidĆ³ y su pandilla estĆ”n simplemente siguiendo a una larga lista de delincuentes y delincuentes de la CIA que manejan sus asuntos ilegales con un guiƱo y un guiƱo de Langley y un recorte financiero considerable para los neoconservadores como Abrams, Kissinger, John Bolton y otros. Los miembros de esa camarilla polĆ­tica infame. Trump a menudo condena el "estado profundo" como un trabajo encubierto para socavarlo. Parece que Trump y sus amigos lo estĆ”n haciendo muy bien, cortesĆ­a de su temido "Estado Profundo".

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